Te conviertes a Cristo o a una religión?

A veces me pongo a analizar cuál es el real enfoque de muchos de nosotros a la hora de predicar? tanto personalmente como sobre un púlpito, y de manera indirecta en las redes sociales. Estamos creando un montón de mini me, o estamos buscando que se conviertan a Cristo?

En esta porción bíblica escrita por Pablo, podemos ver cuál debe ser nuestro real enfoque, y que esto nunca se trató de nosotros, sino más bien de ganar almas para Cristo.

“Aunque soy libre respecto a todos, de todos me he hecho esclavo para ganar a tantos como sea posible. Entre los judíos me volví judío, a fin de ganarlos a ellos. Entre los que viven bajo la Ley me volví como los que están sometidos a ella (aunque yo mismo no vivo bajo la Ley), a fin de ganar a estos. Entre los que no tienen la Ley me volví como los que están sin Ley (aunque no estoy libre de la Ley de Dios, sino comprometido con la ley de Cristo), a fin de ganar a los que están sin Ley. Entre los débiles me hice débil, a fin de ganar a los débiles. Me hice todo para todos, a fin de salvar a algunos por todos los medios posibles. Todo esto lo hago por causa del evangelio para participar de sus frutos. ¿No saben que en una carrera todos los corredores compiten, pero solo uno obtiene el premio? Corran, pues, de tal modo que lo obtengan. Todos los deportistas se entrenan con mucha disciplina. Ellos lo hacen para obtener una corona que se echa a perder; nosotros, en cambio, por una que dura para siempre.”

1 Corintios 9:19-25 NVI

Me encanta como Pablo se moldea de acuerdo a las necesidades de donde él está, sin pensar en religión ni en sus propios principios eclesiásticos, lo más importante para él es ganar almas para cristo.

Sin embargo vemos en este tiempo como los lideres cristiano-evangélicos persiguen adoctrinar a las personas y traerlas a sus doctrinas hechas por hombres, puesto que su religión, y digo su religión porque eso no es lo que Cristo vino a enseñar, está más plasmada en sus corazones que el mismo evangelio de Cristo y el amor hacia el prójimo que Él tanto profesó.

El mismo Pablo era fariseo, y no cualquier fariseo, Pablo se encargaba de perseguir y apresar a todos aquellos seguidores de Cristo o que profesaran una fe distinta a la fe judía, y al ver la transformación de vida, de pensamiento y de corazón de Pablo, me da a entender a mí, que la religión no es la solución para evangelizar, la única via correcta es a través del mensaje de Cristo.

Pablo claramente habla en esta porción bíblica, de que el no se rige por la ley, aunque no es libre de la ley de Dios, el está más bien comprometido a la ley de Cristo.

Así como Pablo dice;” Me hice todo para todos, a fin de salvar a algunos por todos los medios posibles. Todo esto lo hago por causa del evangelio para participar de sus frutos”, así debemos nosotros accionar, en vez de convertir a las personas a nuestra mentalidad y creencias, la meta es que se conviertan a Cristo, no en copias de nuestra doctrina humana.

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